CAMINAR EN HUMILDAD Y TEMOR DE DIOS
Riquezas, honra y vida Son la remuneración de la humildad y del temor de Jehová. (Proverbios 22:4)
La humildad es el reconocimiento de nuestra condición humana, especialmente lo pequeño que somos delante de Dios. Virtud que nos hace caminar confiando plenamente en la grandeza de Dios.
El temor de Jehová es reverencia y respeto, es temor de ofenderle, defraudarle o herirle con nuestras actitudes y el depender totalmente de Él, nos permite gozar de sus bendiciones.
Estas dos virtudes son condiciones del carácter humano que permiten la prosperidad interior y abren la puerta de bendición para que Dios de riqueza, honra y vida. Siempre la condición interna es requisito indispensable para la prosperidad del hombre.
La tercera epístola de Juan verso 2 nos dice: Amado, yo deseo que tú seas prosperado en todas las cosas, y que tengas salud, así como prospera tu alma.
El apóstol Juan afirma claramente que debemos darle mucha importancia al entrenamiento del alma. La prosperidad en todas las cosas, incluyendo la salud son el fruto del trabajo dedicado que hagamos de permitirle al Espíritu Santo que vaya moldeando nuestra vida a la imagen de Cristo.
